Viajar al Karlag de Dolinka. Campos de trabajo soviéticos borrados de la historia
Una mañana del 20 de enero de 2019 a -13ºC, el autobús proveniente de Karaganda nos para en un intersección de carreteras, en medio de la nada, dirección Dolinka.
El aire helado golpea bruscamente en la cara. Vivimos en nuestras carnes el duro invierno de las estepas nortes Kazajas. No podemos dejar de imaginar cómo sería soportar trabajos forzados con ese frío y sin nada para llevarse a la boca.
A tan solo 4 km de nosotros tenemos el centro administrativo de la red de gulag más grandes de la Unión Soviética, los llamados Karlag.
La antigua URSS, a la que nunca le interesó su país vecino nada más que para esclavizar a su pueblo, usaba el territorio Kazajo como auténtico vertedero, probando en su suelo armas químicas y creando campos de trabajo para mandar a los prisioneros que se interponían en su camino.
En los Karlag, que se extendían por toda la estepa kazaja, había prisioneros de todas las nacionalidades. Rusos contrarios a la política del régimen, prisioneros de guerra alemanes, españoles tanto de la división azul como republicanos, polacos, bielorrusos, nómadas kazajos, etc. Miles de personas fueron asesinadas y torturadas. O simplemente morían de cansancio, hambre o frío.
En la actualidad, el centro administrativo de los Karlag, es ahora museo que conmemora a las víctimas mediante recreaciones de escenas, fotos, arte y objetos reales de la época.
Curiosamente es de los pocos recuerdos que quedan de estos campos de trabajo, que fueron intencionalmente destruidos. Mucho se oye hablar de los campos de concentración nazi pero poco se sabe, al menos en occidente, de esta parte de la historia. ¿A qué es esto debido? ¿ Hay víctimas de guerra de primera y de segunda?
Para nosotros fue una triste sorpresa encontrarnos con esta dura historia del pueblo kazajo. Como viajeros, aunque no nos guste lo que descubrimos, tenemos la obligación de contarlo.
Contenidos
ToggleCómo llegar desde Karaganda
Desde la parada de autobuses de Karaganda sale un autobús, con una frecuencia de 20 minutos, dirección Shakhtinsk. El trayecto dura 40 minutos y el precio del billete es de 150 tenges.
Bus nº 121. Horario: 7:00 am – 21:00 pm.
Indicarle a la chica de los billetes que queréis bajar en Dolinka, para que os avise. El autobús para en una intersección de la carretera que va dirección al pueblo. Hay que tener en cuenta que desde donde para el bus hasta el Karlag hay unos 4km.
Dicen que en verano suele haber taxis compartidos. En invierno no hay ningún servicio. Hacerlo andando con sol debe ser horroroso. Nosotros hicimos la ida en autostop y la vuelta andando, en enero a -20º C y un viento terrorífico. Todos los coches que pasaban iban en dirección contraria a nosotros. Mala suerte.
Precio y horarios del museo
El museo está abierto de martes a domingo de 10:00h am a 18:00 pm. Tened en cuenta que el museo cierra de 13:00h a 14:00h pm para la comida. Los lunes está cerrado.
El precio de la entrada es de 650 tenge.
Si quieres usar la cámara para hacer fotos tienes que pagar 400 tenge.
Si quieres guía de habla inglesa tendrás que pagarlo a parte.
Qué ver en el museo. ¿Merece la pena?
El exterior parece de película. Un edificio enorme de arquitectura soviética que contrasta con el pueblo de aspecto descuidado. Puedes encontrar bustos de Stalin, Lenin y otros mandatarios.
El interior del edificio era un centro de mandos. Es decir, dentro no se mataba a nadie. Pero sí en muchos edificios de alrededor los cuales actualmente, según nuestro guía, están habitados. ¿Cómo se puede vivir en un sitio donde se mataba a personas?
En el museo podrás encontrar múltiples recopilación de fotos de presos y presas. Los niños de estos presos eran separados de sus padres y los llevaban a orfanatos donde la mayoría morían de hambre y frío.
La sala de mandos se puede ver en la actualidad tal y como se encontraba en su día.
También recrean escenas reales de los espectáculos que hacían los presos en los campos de trabajo para entretener a otros prisioneros.
Recreación de la enfermería y laboratorios con objetos recuperados de los campos de trabajo.
Se puede ver como eran las salas de torturas a las que estaban sometidos los presioneros de guerra.
Nuestro guía nos contó que un preso podía estar semanas metido en este agujero donde no puedes ponerte de pie.
En esta sala se registraba a los reclusos, se le hacía la foto y se le asignaba un número.
Podrás encontrar una exposición de objetos personales, cartas y diarios de los presos.
Libros censurados y rajados para impedir su lectura. Algo que nos dejó impresionados es que el Karlag tenía su propio periódico.
Merece la pena llegar hasta aquí para ser consciente de que esta parte de la historia existió y evitar que se vuelva a repetir. Si tienes tiempo en el país, es muy recomendable.
Consejos prácticos para la visita al museo
- Id temprano teniendo en cuenta que a la 13:00 pm cierran. Si llegáis a las 12:00 pm solo tendréis una hora. Si no, id directamente a partir de las 14:00 pm.
- En verano llevad agua y gorra para proteger a cabeza del sol si pensáis recorrer, o no os queda otra alternativa, los 4 km andando. En invierno es fácil hacer autostop de camino al pueblo pero difícil el regreso. No salgáis muy tarde para que no se haga de noche.
- Llevad algo de comer. En el pueblo hay varios supermercados pero no vimos ningún restaurante para comer comida caliente.
Alrededor del Karlag
Si os interesa mucho esta parte de la historia y queréis sacarle buen provecho al viaje se puede visitar también el cementerio de niños y el hospital de prisioneros de Dolinka.
A unas 6 horas del Karlag, se encuentra el campo de trabajo Spassk. O lo poco que queda de él.
Documentales y libros relacionados
Si os ha despertado curiosidad ésta terrorífica historia de la humanidad y queréis saber más sobre el tema, aquí os dejo una lista de documentales y libros.
Documentales
- Los olvidados de Karaganda
- El terrible legado nuclear soviético de Kazajistán
Libros
- Silent Steppe – Muthament Shayathmetor
- Harina de otro costal – Ana Cepeda
Soy hipoacúsica de ambos oídos y desde bien pequeñita vivo entre dos mundos.
He aprendido a estar en equilibrio entre mi mundo natural, en el que veo voces difusas y encuentro paz en los silencios. Y el mundo de oyentes, al que me transporto cuando enciendo mis audífonos. Puede saber mas sobre mi aquí.
Únete a nuestra comunidad y recibe GRATIS TU GUÍA
para viajar por libre y barato con dificultad auditiva
¿Por qué viajar a Kazajistán? Kazajistán es el país más grande de Asia central y el menos turístico. Algo que no podemos entender después de
Guía completa para viajar a Kazajistán Si has llegado hasta aquí, es porque has decidido viajar a Kazajistán. ¡No te vas a arrepentir! Es uno
¿Es seguro viajar a Kazajistán? Desde el 2011 los occidentales tendemos a asociar los países que terminan en “Stan” como peligrosos. Pero lo cierto es que
Qué ver y hacer en Kazajistán. Itinerario 15 días Después de estar durante un mes haciendo turismo y recorriendo Kazajistán, os dejamos los que para
Aksu Zhabagly. Trekking por la reserva natural más antigua de Kazajistán La reserva natural de Aksu es la más antigua que se conoce en Kazajistán.
Cruce de frontera de Kazajistán a Uzbekistán Como ya sabrás, hace unos meses recorrimos Asia central desde Siberia hasta Uzbekistán. Cruzar las fronteras por tierra